Recogimos a Renato con una herida muy importante en su patita delantera izquiera. Herida que despues de meses, aunque con mucho mejor aspecto, seguimos teniendo bajo tratamiento.
La sorpresa vino después, tras 3 meses con nosotros tuvo una crisis convulsiva. Hoy por hoy está con su tratamiento, totalmente controlado, pero con revisiones periodicas.
Sabemos que ese es el único motivo por el que Renato sigue con nosotros después de tantos meses. El es un perro con un caracter perfecto, equilibrado, sociable y tan cariñoso que encajaria en cualquier familia. Pero necesita una familia especial, para este perro especial, que se merece su final feliz.